MODELOS DE GOBIERNOS ARGENTINOS HASTA LA PRESIDENCIA DE BERNARDINO RIVADAVIA
Primera Junta
Se conoce con el nombre de Primera Junta de Gobierno a la «Junta Superior Provisional Gubernativa de las Provincias del Río de la Plata a nombre del Señor Don Fernando VII» surgida como consecuencia de la Revolución de Mayo en Buenos Aires el 25 de mayo de 1810, tras la destitución del virrey Baltasar Hidalgo de Cisneros.
La sede del gobierno fue fijada en el Fuerte de Buenos Aires, que sirviera desde 1776 como residencia de los virreyes y donde hoy se encuentra la Casa de Gobierno.
Los principios que proclamó la Revolución de Mayo fueron los siguientes:
La soberanía popular.
El principio representativo y federal.
La división de poderes y duración de los mandatos.
La publicidad de los actos de gobierno.
Presidente
* Cornelio Saavedra
Secretarios
* Mariano Moreno
* Juan José Paso
Vocales
* Manuel Alberti
* Miguel de Azcuénaga
* Manuel Belgrano
* Juan Jose Castelli
* Domingo Matheu
* Juan Larrea
Fundamentos doctrinarios y duración
Al principio, la Junta no se presentó como una ruptura al orden preexistente, sino como una continuidad de la soberanía del monarca, Fernando VII, prisionero en Francia. Se basó en la teoría de la retroversión de la soberanía, expuesta por Castelli en el Cabildo Abierto del dia 22 de mayo, y el derecho de los pueblos a conferir la autoridad o mando en ausencia del monarca. Sin embargo, algunos miembros, como Moreno, querían romper definitiva y totalmente los lazos con ese país.
Estos fundamentos doctrinarios se complementaron con la teoría de la subrogación, por la cual al sustituir a la autoridad virreinal se asumían todas sus funciones y dignidades, por lo que la Junta debía ser reconocida por todas las ciudades y villas.
El nuevo gobierno desconoció la autoridad del Consejo de Regencia sobre el territorio americano, basándose por un lado en su carencia de representatividad con respecto a los territorios americanos; por el otro, en su falta de legitimidad, puesto que el órgano que le había transmitido sus poderes, la Junta Suprema Central, no disponía de las facultades para hacerlo.
La Junta fue creada el 25 de mayo de 1810 y luego se transformó el 18 de diciembre del mismo año en la llamada Junta Grande.
Acción de gobierno
Una de las primeras medidas de la junta fue exigir juramento de obediencia; la Audiencia, el Cabildo y el Tribunal de Cuentas lo hicieron bajo protesta. Con el objetivo de incorporar el interior al proceso revolucionario, se envió la Circular del 27 de mayo a las ciudades y villas del interior. El documento comunicaba el cambio de gobierno, exigía el reconocimiento y solicitaba la designación de representantes, que debían trasladarse a Buenos Aires, para integrar la Junta "Según el orden de llegada".
El 28 de mayo la Junta dictó su propio reglamento. Los asuntos del gobierno se derivaron en dos secretarías: de Gobierno y Guerra, a cargo de Mariano Moreno, y de Hacienda, encomendada a Juan José Paso. Las milicias fueron transformadas en regimientos regulares, dando origen al ejército de la revolución. Reconocía el derecho a petición al declarar que todo ciudadano podía hacer conocer a la Junta sus preocupaciones en materia de seguridad y "felicidad pública".
Obras de gobierno
La Gazeta de Buenos Ayres
La Gazeta de Buenos Ayres
* Invitó a las provincias a enviar diputados para que participaran en un Congreso.
* Creación por decreto de La Gazeta de Buenos Aires, primer periódico que fue usado como medio de propaganda política criollo.
* Fundó la Biblioteca Pública y fomentó la educación primaria.
* Atendió las necesidades de los indígenas y la salud de la población.
* Creó la primera escuadrilla naval y el Ejército.
* Creó el Departamento de Comercio y Guerra.
* Abrió la Escuela Militar de Matemática, destinada a la formación de oficiales jóvenes.
* Habilitó nuevos puertos para agilizar la exportación de productos autóctonos.
* Promovió la venta de tierras en zonas fronterizas, para incentivar el poblamiento de todo el territorio y aprovechar las riquezas naturales.
* Ordenan la detención del virrey Cisneros.
* Ordenan el arresto de Santiago de Liniers.
* Envían a Mariano Moreno en misión diplomática a Londres.
* Envían expediciones militares a Paraguay y Alto Perú.
Los funcionarios españoles se resistieron al desplazamiento de Cisneros. Surgió así el problema de la contrarrevolución.
En Buenos Aires los principales núcleos de oposición fueron: la Audiencia, el Cabildo y el ex virrey. La Audiencia no reconoció a la Junta. Esta dispuso, en junio de 1810, la detención de Cisneros y de los miembros de la Audiencia y su embarque hacia España.
El Cabildo continuó en la oposición, hasta que sus integrantes fueron reemplazados por partidarios de la revolución.
En el interior, las autoridades de Córdoba, Potosí, Cochabamba, La Paz, Chuquisaca, Paraguay y Montevideo desconocieron el poder de la Junta Gubernativa. Se organizaron movimientos contrarrevolucionarios; el más peligroso, por su cercanía de Buenos Aires, fue el de Córdoba, que, dirigido por Liniers, estableció contactos con las autoridades altoperuanas, y reunió fuerzas para resistir.
Los primeros cabildos en reconocer a la junta fueron los de Maldonado y Colonia del Sacramento, pero estas poblaciones fueron ocupadas por los realistas de Montevideo. Los cabildos de Luján (el 2 de junio), Santa Fe, Misiones (8 de julio), Corrientes y Entre Ríos (Nogoyá, Concepción del Uruguay, Gualeguay y Gualeguaychú) reconocieron inmediatamente a la Junta. Mendoza reconoció a la Junta el 23 de junio pero el cabildo de San Juan la rechazó el 13 de julio y la reconoció el día 28, mientras que La Rioja evitó pronunciarse a favor hasta el 1 de setiembre. San Luis la reconoció el 13 de junio, Salta el 19 del mismo mes en medio de una gran oposición y el 29 Santiago del Estero. En Catamarca el Cabildo nombró a un realista para unirse a la Junta Grande, pero el 4 de septiembre lo destituyó. San Miguel de Tucumán decidió el 11 de junio esperar la decisión de Salta y luego lo hizo a favor el 26 de junio, San Salvador de Jujuy no se expidió hasta el 4 de setiembre. Tarija la reconoció el 25 de junio. Río Cuarto lo hizo el 9 de agosto, después de sofocada la rección de Liniers lo mismo que el de Córdoba.
La Junta trató de disuadir a los complotados; al no lograrlo, recurrió a la acción armada y a los castigos ejemplares. La medida más controvertida fue el fusilamiento de los contrarrevolucionarios de Córdoba, ejecutado durante la Primera Campaña al Alto Perú. Fue aprobado por la totalidad de los miembros de la Junta, con excepción del sacerdote Manuel Alberti.
Tres campañas militares organizó la Junta para terminar con la oposición de los funcionarios metropolitanos: Campaña al interior y al Alto Perú (1810-1811); Campaña al Paraguay (1811) y la Campaña a la Banda Oriental (1811-1812).
Artículo principal: Ejército del Norte
Crisis y transformación de la Junta
Hacia fines de 1810 las divergencias entre morenistas (tendencia más radical dentro de la Junta, conducida por Moreno) y saavedristas (tendencia más conservadora, encabezada por Saavedra) derivaron en la primera crisis de gobierno.
Como respuesta al gesto de un oficial de los Patricios, en que durante un banquete de oficiales exaltaba excesivamente la persona de Saavedra, como si fuera el "rey o emperador de América", Moreno presentó a la Junta un proyecto de Supresión de Honores. Éste reservaba los honores para la Junta como institución de gobierno, eliminando los destinados al presidente (Saavedra). Hábilmente, éste no opuso, y el documento fue aprobado el 6 de diciembre de 1810. Sin embargo, los jefes milicianos, temerosos de la pérdida de poder de Saavedra, presionaron para desplazar a Moreno.
Las ciudades del interior, cumpliendo lo dispuesto en la circular del 27 de mayo, enviaron sus representantes a la capital, para ser incorporados en la Junta. El Deán Funes, diputado de Córdoba, lideró el grupo.
Partidarios de la revolución, pero moderados en su mayoría, tenían diferencias con los porteños, fueran estos moderados o morenistas. Defendían el derecho de los pueblos a participar en el gobierno y recelaban de la supremacía de la capital.
Moreno se oponía a integrarlos a la Junta, considerando que debían formar el Congreso General de los pueblos para sancionar la constitución y establecer la forma definitiva de gobierno. Advertía que aumentar el número de integrantes del ejecutivo atentaría contra la unidad de criterio y la rapidez de la toma de decisiones.
La votación del 18 de diciembre de 1810, destinada a decidir la incorporación de los diputados del interior terminó con una amplia mayoría a favor de la incorporación.
Mariano Moreno consideró que la decisión era contraria al bien general del Estado, aceptó la voluntad de la mayoría y presentó su renuncia, que no fue aceptada. Posteriormente solicitó ser enviado en misión diplomática al exterior. Se le encomendó realizar gestiones en Río de Janeiro y Londres, pero murió en altamar.
Los diputados fueron integrados a la Junta, y el conjunto constituyó la llamada Junta Grande, que se formó oficialmente ese mismo día.
Junta Grande
La Junta Grande fue el gobierno ejecutivo que se creó en las Provincias Unidas del Río de la Plata el 18 de diciembre de 1810 a partir de la Primera Junta, con la incorporación de los diputados provenientes de las provincias que integraron el ex Virreinato del Río de la Plata.
Origen
El 27 de mayo del mismo año, es decir, justo después de la Revolución de Mayo, la Primera Junta había enviado una circular a los cabildos del interior para que enviaran sus representantes a Buenos Aires, con el fin de sumarse al nuevo gobierno. En diciembre de ese año, casi todos los delegados habían llegado y solicitaron su incorporación.
El 18 de diciembre de 1810 se celebró una reunión entre los 7 integrantes de la Primera Junta que se hallaban en Buenos Aires y los 9 diputados de las provincias que habían llegado a la capital, en esa reunión conjunta 13 (Saavedra, Azcuénaga, Alberti, Matheu, Larrea, Manuel Ignacio Molina, Tarragona, García de Cossio, Gurruchaga, Manuel Felipe Molina, Funes, Pérez de Echalar, Olmos de Aguilera y Gorriti) votaron por la incorporación de los diputados a la Junta mientras que Moreno y Paso votaron en contra. La renuncia de Mariano Moreno no fue aceptada y al día siguiente se prestó juramento quedando constituida la Junta Grande que gobernó hasta el 22 de septiembre de 1811, cuando fue reemplazada por un golpe institucional encabezado por el Primer Triunvirato, que volvería a las tendencias centralistas de la Primera Junta.
Obra
La Junta Grande desarrolló, principalmente, una política de espera y de cautela ante los sucesos de la contrarrevolución y de España.
Uno de los principales problemas con los que debió contar la Junta Grande, fueron las múltiples tendencias internas en su seno, que llevaron a un accionar lento, dado que desde ese momento las decisiones ya no podían hacerse solamente pensando en favor del puerto de Buenos Aires y su gente, sino en pos de todo el país allí representado.
La Junta Grande intentó dar participación a los pueblos del interior mediante el Decreto de Juntas Provinciales: ésta establecía en cada capital de intendencia una Junta Provincial con autoridad sobre toda la gobernación, integrada por el gobernador, el intendente designado por el gobierno central de Buenos Aires y cuatro vocales elegidos por los vecinos de cada ciudad. En las ciudades dependientes se formaban juntas subordinadas integradas por el gobernador delegado y dos vocales electivos.
El nuevo sistema, propuesto por Gregorio Funes, diputado por Córdoba, fue bien recibido en las capitales de intendencia pero resistido en las ciudades subordinadas, que no integraban las Juntas Provinciales.
Desarrollo de la Guerra por la Independencia
La guerra fue iniciada contra los funcionarios españoles que no reconocían al nuevo gobierno, extendiéndose al Alto Perú, el Paraguay y la Banda Oriental.
- En el Alto Perú, las fuerzas revolucionarias enviadas por la Primera Junta obtuvieron la victoria en la batalla de Suipacha (7 de noviembre de 1810), liberando Potosí y expandiendo la revolución en la región. Sin embargo, el triunfo no pudo mantenerse: Castelli no se supo mantener al provocar deserciones con su actitud jacobina. El pueblo desertó de las milicias por temor a ser excomulgados y el ejército español recibió refuerzos del Perú obteniendo la victoria en la batalla de Huaqui (20 de junio de 1811). Los revolucionarios debieron retirarse hasta Jujuy y los realistas recuperaron la región
- En el Paraguay, una expedición dirigida por Manuel Belgrano debía lograr el reconocimiento del gobierno de Buenos Aires, con la orden de Mariano Moreno de fusilar automáticamente al gobernador de esa provincia. Las fuerzas porteñas fueron derrotadas en Paraguarí (9 de enero de 1811) y Batalla de Tacuarí (9 de marzo de 1811). No obstante, el 14 de mayo de 1811 estalló en Asunción una revolución liderada por liberales que destituyó al gobernador y estableció una Junta local. Desacuerdos con el gobierno centralista de Buenos Aires determinaron una política aislacionista que mantuvo al Paraguay al margen de la guerra por la independencia.
En la Banda Oriental estalló una insurrección de la población rural contra las autoridades españolas de Montevideo encabezadas por el virrey Francisco Javier de Elío — que no era reconocido como tal fuera de la ciudad. El movimiento cobró fuerza bajo la jefatura del hacendado José Gervasio de Artigas.
El gobierno de Buenos Aires decidió el envío de fuerzas que junto con los orientales vencieron en Las Piedras a las tropas de Elío y pusieron sitio a Montevideo en junio de 1811. Sin embargo, la ciudad — perfectamente amurallada — resistió. La flota española dominó el Río de la Plata y bloqueó el puerto de Buenos Aires.
Movimiento del 5 y 6 de Abril
Ante la aparente debilidad de la Junta, el grupo morenista preparó un levantamiento, pero los cuerpos leales a Saavedra se adelantaron. Gran número de personas procedentes de afuera de la ciudad ocuparon la Plaza de Mayo con el apoyo de las tropas, en la noche del 5 al 6 de abril. Presentaron ante el Cabildo una serie de peticiones, que fueron aceptadas por la Junta y los jefes militares.
Resultaron reemplazados cuatro miembros morenistas de la Junta: Larrea, Azcuénaga, Vieytes y Rodríguez Peña. Como secretario de gobierno fue nombrado Joaquín Campana, que asumió el liderazgo de la Junta, compartido con Saavedra y el Deán Funes. Para juzgar a quienes atentasen contra el gobierno, se creó el Tribunal de Seguridad Pública.
Una curiosa consecuencia de estas expulsiones fue la rebelión del cabildo de San Luis, adonde fueron internados algunos de los expulsados. Éstos convencieron al cabildo de retirar la representación del diputado Marcelino Poblet, con la intención de debilitar a la Junta. Pero la Junta decidió que Poblet siguiera en su cargo; de esta manera se defendía de sus adversarios, pero también se restaba apoyo de los cabildos del interior. Eso sería determinante más tarde, cuando éstos no defendieron a la Junta frente a la presión porteña que causaría su caída, por no sentirse enteramente representados por ella.
Crisis y transformación del Gobierno
A mediados de 1811 la situación militar se tornó desfavorable. La derrota de las fuerzas revolucionarias en Huaqui dejó el Alto Perú en manos enemigas e interrumpió el comercio con Potosí. La Junta decidió enviar a Saavedra al Norte para reorganizar el ejército y frenar la posible invasión española; el gobierno quedó así sin su principal autoridad. En la Banda Oriental, el ejército revolucionario había puesto sitio a Montevideo. Elío, designado virrey del Río de la Plata, contaba con la flota de Montevideo, con la cual dominaba los ríos y bloqueaba Buenos Aires.
La situación fue aprovechada por el cabildo de la capital, obligando a la Junta Grande a negociar su poder con él. El cabildo obtuvo que se llamara a una asamblea de apoderados del pueblo; mientras se llevaban a cabo las elecciones, el secretario Campana fue obligado a renunciar. En una reunión con la Junta, del 22 de septiembre de 1811, el cabildo logró que la Junta ordenara la creación de un nuevo gobierno: el que sería conocido como Primer Triunvirato. Los hombres de Buenos Aires creían necesaria la concentración del poder para proceder con energía y celeridad.
Las relaciones del Triunvirato con la Junta no estaban bien definidas, y por eso éste se alió con el cabildo en contra la de Junta. Ésta continuó existiendo, transformada en Junta de Conservación de los Derechos de Fernando Séptimo, con la misión teórica de ejercer como poder legislativo.
Pero el Triunvirato no estaba dispuesto a aceptar su superioridad. Cuando la Junta sancionó un reglamento constitucional, el gobierno lo sometió a la decisión del Cabildo de Buenos Aires, dejando en claro que éste era superior a la Junta; y lo alentó a rechazarlo. Como la Junta se quejó del procedimiento, simplemente la disolvió oficialmente, en noviembre de ese mismo año.
Unas semanas más tarde, los diputados del interior fueron expulsados de la ciudad, acusados de haber fomentado el "Motín de las Trenzas".
Integrantes de la Junta Grande
Al constituirse el 18 de diciembre de 1810
Cornelio Saavedra
Mariano Moreno
Juan José Paso
Manuel Alberti
Miguel de Azcuénaga
Domingo Matheu
Juan Larrea
Manuel Belgrano (ausente)
Juan José Castelli (ausente)
Juan Francisco Tarragona (Santa Fe)
José Simón García de Cossio (Corrientes) elegido el 3 de julio de 1810
Manuel Ignacio Molina (Mendoza) elegido el 9 de octubre de 1810
José Antonio Olmos de Aguilera (Catamarca) elegido el 4 de setiembre de 1810
Manuel Felipe Molina (Tucumán) elegido el 16 de agosto de 1810
Francisco de Gurruchaga (Salta) elegido el 31 de agosto de 1810
Gregorio Funes (Córdoba) elegido el 18 de agosto de 1810
José Julián Pérez (Tarija) elegido el 20 de agosto de 1810
Juan Ignacio Gorriti (Jujuy)
Los integrantes de la Junta Grande fueron en total 18.
No se incorporaron
Juan José Lami (Santiago del Estero) elegido el 9 de julio de 1810
José Francisco Javier de Orihuela (Cochabamba) elegido el 16 de octubre de 1810
Ramón Mariaca (La Paz)
Bernardo Ortiz (Mendoza) elegido el 25 de junio de 1810 - falleció y fue reemplazado
José Bonifacio Redruello (Concepción del Uruguay) elegido el 30 de julio de 1810 - desistió por ser realista
Ignacio de Acuña (Catamarca) elegido el 4 de agosto de 1810 - reemplazado debido a la circular del 18 de julio de 1810
Se incorporaron posteriormente
Marcelino Poblet (San Luis) elegido el 30 de junio de 1810
José Ignacio Fernández Maradona (San Juan)
Hipólito Vieytes (en reemplazo de Moreno)
José Nicolás Ortiz de Ocampo (La Rioja)
Pedro Francisco de Uriarte (Santiago del Estero, reemplazó a Lamí)
El Cabildo de Asunción se negó el 18 de agosto de 1810 a enviar un representante.
El Primer Triunvirato
fue el órgano ejecutivo que reemplazó a la Junta Grande y gobernó las Provincias Unidas del Río de la Plata entre el 23 de septiembre de 1811 y el 8 de octubre 1812.
Triunviros
Feliciano Chiclana
Juan José Paso
Manuel de Sarratea
En abril de 1812, Paso fue reemplazado por Juan Martín de Pueyrredón.
Secretarios sin voto:
Bernardino Rivadavia
José Julián Pérez
Vicente López y Planes
Origen del Primer Triunvirato
La Junta Grande era un cuerpo aceptablemente representativo de la opinión pública de las ciudades del interior, pero la acción ejecutiva de la misma se veía trabada por el excesivo número de sus miembros. La oposición acusaba a la Junta, con bastante razón, de inoperante. La falta de un reglamento hacía que tuvieran que ocuparse de discusiones nimias, postergando las importantes.
Después de que el General José Manuel de Goyeneche al mando de las tropas realistas derrotara a las fuerzas revolucionarias americanas en la Batalla de Huaqui, ocurrida el 20 de junio de 1811, el desprestigio de la Junta se incrementó.
La decisión de Cornelio Saavedra, presidente de la Primera Junta, de encargarse personalmente de la reorganización del Ejército del Norte, dio lugar a un alzamiento del sector que apoyaba a Mariano Moreno, que aprovechó su ausencia para forzar la elección de dos nuevos vocales por Buenos Aires para la Junta. Casi al mismo tiempo, se decidió concentrar el poder en un Triunvirato, formado por los dos nuevos diputados porteños (Paso y Chiclana) y por el más votado de los electores que habían participado de esa elección (Sarratea). De este modo, el poder representativo de la Junta quedaba reducido a la representación de los partidos (si es que se le puede dar ese nombre) de la Capital.
La formación del Triunvirato no significaba - al menos en un principio - la disolución de la Junta Grande, sino su transformación en una Junta Conservadora con atribuciones legislativas. Estaba formada por los miembros de la disuelta Junta Grande, pero de los cuales quedaban expresamente exceptuados Joaquín Campana y Cornelio Saavedra.
Centralización política
La Junta Conservadora se abocó a la tarea de elaborar un documento para establecer las atribuciones de cada poder y el funcionamiento del gobierno.
Esta Junta redactó el 22 de octubre de 1811 un Reglamento Orgánico que adoptaba el principio de división de poderes. El Poder Legislativo residía en la Junta Conservadora de la Soberanía del señor Fernando VII y de las leyes nacionales, con facultad para declarar la guerra, firmar la paz, tratados de límites, crear tribunales y nombrar a los individuos del Poder Ejecutivo. El Triunvirato desempeñaba el Poder Ejecutivo, que respondía ante la Junta. El Poder Judicial, independiente, era ejercido por la Audiencia.
El Triunvirato, considerando que la Junta Conservadora se reservaba excesivos poderes, la disolvió, dejó sin efecto el Reglamento Orgánico y asumió la totalidad del gobierno.
Para justificar su acción y organizar el gobierno, el 22 de noviembre de 1811 sancionó el Estatuto Provisional, que lo facultaba para asumir el gobierno y "adoptar cuantas medidas estime necesarias para la defensa y salvación de la Patria".
En diciembre de 1811 estalló un golpe contra el Triunvirato que tuvo su centro en el Regimiento de Patricios, el llamado Motín de las Trenzas. Tropas leales al gobierno lo reprimieron y el Triunvirato dispuso la expulsión de los diputados del interior, acusados de haber contribuido al levantamiento.
El Triunvirato suprimió las juntas provinciales, demostrando su tendencia centralista. Los gobernadores y sus delegados, elegidos desde Buenos Aires, eran en su mayoría porteños.
También postergó la definición del tema de la independencia y la Constitución. Se inició una etapa de marcado centralismo: las decisiones se tomaban en la capital y debían llegar a todas las provincias. Se fundamentaba en que la concentración del mando era necesaria para conducir al país en medio de la guerra.
En cierto sentido, éste fue el nacimiento del unitarismo.
Gobierno
Entre las medidas del Triunvirato se cuentan:
Declaración de la libertad de prensa.
Aprobación de la ley de seguridad individual.
Creación de la Cámara de Apelaciones.
Reglamento de Institución y Administración de Justicia.
13 de enero de 1812: se creó el Gobierno Intendencia de la Provincia de Buenos Aires.
Ordenó a Manuel Belgrano llevar tropas a proteger el pueblo de Rosario de los ataques navales españoles que partían desde Montevideo.
18 de febrero de 1812: aprobó la utilización de una escarapela blanca y celeste, para su uso en el ejército. El mismo día ordenó a Belgrano hacerse cargo del Ejército del Norte.
16 de marzo: Ordenó al teniente coronel José de San Martín la formación de un cuerpo especial de caballería, que sería conocido con el nombre de Granaderos a caballo.
Comisión de Inmigración: fue fundada el 4 de setiembre de 1812 y constituyó la primera entidad establecida para fomentar la inmigración y colonización del territorio. Las guerras por la independencia impidieron su funcionamiento, aunque fue reactivada años más tarde, cuando Bernardino Rivadavia fuera ministro del gobierno de Buenos Aires, en 1824. Fue disuelta el 20 de agosto de 1830 por orden de Juan Manuel de Rosas.
La política frente a España
Bajo la dirección de Rivadavia, el gobierno mantuvo la política de aparente fidelidad a Fernando VII, postergando toda definición sobre el tema de la independencia y la constitución, aunque la guerra continuaba. El Reino Unido, aliado de España en la guerra contra Napoleón, aconsejaba mantener el reconocimiento del rey cautivo. Por esta razón se ordenó a Manuel Belgrano que guardara la bandera celeste y blanca que había presentado a las tropas en las barrancas del Paraná el 27 de febrero de 1812.
Estratégicamente, el Triunvirato se replegó a posiciones defensivas: en el Litoral, fuerzas portuguesas avanzaron sobre la Banda Oriental, en apoyo de los realistas de Montevideo. El Triunvirato decidió negociar un armisticio el 20 de octubre de 1811 con el llamado Virrey Francisco Javier de Elío, por el que se puso fin al sitio de Montevideo. Tanto las tropas de Buenos Aires como las portuguesas se retirarían de la Banda Oriental, que junto con los pueblos entrerrianos de Gualeguay, Gualeguaychú y Concepción del Uruguay, quedaba en poder español.
Por otro lado, se le ordenó a Belgrano que, en caso de un avance realista por el norte, se replegara hasta Córdoba, abandonando la totalidad de la provincia de Salta, que en ese momento incluía también Tucumán, Santiago del Estero y Catamarca.
Uno de los jefes de los gauchos de la Banda Oriental, José Artigas, rechazó el acuerdo y se trasladó al Campamento de Ayuí, seguido por gran parte de la población oriental, episodio conocido como el éxodo del pueblo oriental.
El 1 de julio de 1812, el ministro Rivadavia descubrió una conspiración de españoles contra el gobierno. Durante las investigaciones, el secretario Rivadavia, basado en pruebas y confesiones extremadamente sospechosas, extendió la acusación a Martín de Álzaga, héroe de la época de las invasiones inglesas, y a un extenso grupo de partidarios, casi todos españoles.
Álzaga y sus "cómplices" fueron sometido a un proceso criminal secreto y expeditivo (sólo duró dos días, lo que deja en claro que los acusados complotados ya estaban condenados de antemano) por el cual fueron condenados a muerte. Las ejecuciones comenzaron el 4 de julio y, en total, fueron ejecutados más de treinta hombres, incluidos jefes militares, frailes y comerciantes. Sus bienes fueron expropiados.
En realidad, caben serias dudas de que la conspiración fuera siquiera real. La inclusión de Álzaga entre los acusados fue, muy posiblemente, una venganza personal de Rivadavia por una vieja afrenta.
Un grupo de jóvenes americanos, que habían íntegrado el ejército español en la lucha contra Napoleón, llegó a Buenos Aires en marzo de 1812. Su objetivo era luchar por la independencia. Habían ingresado en las logias secretas liberales que actuaban en Europa, dependientes de la Gran Unión Americana, organizada por el "precursor" Miranda en Londres. El triunvirato los incorporó al ejército y les reconoció el grado militar.
Entre ellos se destacaba José de San Martín, a quien el gobierno le encomendó la organización de un cuerpo de caballería - el Regimiento de Granaderos a Caballo - y Carlos María de Alvear, joven ambicioso integrante de una de las principales familias porteñas.
A poco de llegar organizaron una sociedad secreta, la Logia Lautaro, con la finalidad de luchar por la independencia y la organización constitucional en América; se proponía fortalecer la unidad política y militar de la revolución, planeando una estrategia global frente al poder de los españoles en América. Incorporaron personalidades que sostenían el ideal emancipador, como Monteagudo, líder de la sociedad patriótica.
La logia matriz residía en Buenos Aires; su presidente era Alvear, siendo su vicepresidente San Martín. Poseía además filiales en el interior. Los miembros se llamaban Hermanos, tenían un código para comunicarse y se comprometían a consultar a la logia en caso de ser elegidos para integrar el gobierno.
Al mismo tiempo, los Jóvenes de la Sociedad Patriótica, que inicialmente apoyaban al gobierno, comenzaron a criticarlo. Desde diferentes periódicos insistían sobre la necesidad de declarar la independencia y de reunir un congreso que sancionase una constitución. Con el paso del tiempo, las miras de la Logia y de la Sociedad llegaron a confluir en una oposición conjunta.
La acción de sus miembros estuvo limitada por sucesivas luchas por el poder. Con este gobierno, los morenistas lograron neutralizar a sus adversarios, pero las luchas internas y la amenaza de una invasión del Brasil minaron su poder.
A principios de octubre llegó a la capital la noticia de que, contrariando las órdenes del Triunvirato, Belgrano había enfrentado la invasión realista en la batalla de Tucumán, logrando una importante victoria. Esta noticia derrumbó el prestigio que podría haber mantenido el Triunvirato.
José de San Martín, conjuntamente con los miembros de la Logia Lautaro y la Sociedad Patriótica coincidieron en privilegiar la organización del Ejército Libertador y la declaración de la Independencia. La logia intentó llegar al poder apoyando la candidatura de Bernardo de Monteagudo en la renovación de los triunviros, estipulada para octubre de 1812. El Triunvirato logró el rechazo de Monteagudo y la elección de Pedro Medrano, allegado de Rivadavia, asegurando la continuidad de su política.
Al ver cerrado el camino al gobierno, la logia movilizó a las tropas, ocupando la Plaza de Mayo en la madrugada del 8 de octubre con las tropas del Regimiento de Granaderos a Caballo bajo el mando de San Martín y el de Arribeños, al mando de Ocampo. Por su parte, la Sociedad Patriótica recurrió a las peticiones públicas y a la movilización de vecinos.
Después de ciertas vacilaciones, renunció el gobierno y se constituyó el Segundo Triunvirato, el cual estaba en sintonía con la Logia Lautaro. La elección fue ratificada por el pueblo.
Segundo Triunvirato
El Segundo Triunvirato fue el órgano ejecutivo de gobierno, que reemplazó al Primer Triunvirato y condujo entre 1812 y 1814 los destinos de las Provincias Unidas del Río de la Plata (conocidas entonces como Provincias Unidas de Sudamérica).
Inicialmente, Antonio Álvarez Jonte, Juan José Paso y Nicolás Rodríguez Peña.
Desde febrero de 1813: Antonio Álvarez Jonte, José Julián Pérez y Nicolás Rodríguez Peña.
Desde agosto de ese año, Gervasio Posadas, José Julián Pérez y Nicolás Rodríguez Peña.
Desde noviembre, Gervasio Posadas, Juan Larrea y Nicolás Rodríguez Peña.
Entró en funciones el 8 de octubre de 1812 y fue disuelto el 31 de enero de 1814, al crear el Directorio.
Origen
Un alzamiento revolucionario, producido en octubre de 1812, exigió la creación de un Segundo Triunvirato. Desde el 9 de marzo de 1812, con la llegada desde Europa de José de San Martín y otros patriotas, el impulso revolucionario que animó a los hombres de Mayo se fortaleció. El 8 de octubre, San Martín y Ocampo reunieron sus tropas en la plaza principal y forzaron el cambio de gobierno y la convocatoria de una Asamblea Constituyente para la elección de un nuevo Triunvirato.
El resultado del escrutinio para integrar el Triunvirato fue el siguiente:
Juan José Paso (96 votos a favor - 87 en contra)
Nicolás Rodriguez Peña (172 a favor - 12 en contra)
Antonio Álvarez Jonte (147 a favor - 35 en contra)
Por decisión del Cabildo del 8 de octubre de 1812, ordenaron el arresto de Bernardino Rivadavia y lo obligaron a alejarse de la capital. También a Juan Martín de Pueyrredón se le ordena retirarse a San Luis y el periodista Vicente Pazos Silva (rival de Bernardo de Monteagudo) es detenido y desterrado. Después de constituirse la asamblea general Rivadavia y Pueyrredón serían juzgados.
El 4 de diciembre de 1812 se estableció una comisión para redactar la Constitución.
El 31 de enero de 1813 se estableció en Buenos Aires la Asamblea General Constituyente, conocida como Asamblea del Año XIII.
El 10 de marzo se creó la Facultad de Medicina bajo la dirección de Cosme Argerich.
El 14 de noviembre se creó la provincia de Cuyo (actuales territorios de Mendoza, San Juan y San Luis).
La creación del Directorio
Desde el inicio hubo enfrentamientos debido a que Paso era de tendencia moderada, mientras Peña y Jonte eran partidarios de la Logia Lautaro, con lo cual gran parte de las decisiones que tomaba este gobierno se veían influidas por las ideas de esta sociedad secreta.
Desde la instalación de la Asamblea, ésta mantuvo una superioridad política sobre el gobierno, pero ya a fines de ese mismo año de 1813, ésta dejó de reunirse casi por completo, y dejó toda la iniciativa en manos del gobierno.
Si bien tuvo inicios provisionales, con el tiempo aparecieron los problemas: Fernando VII retomó la corona y crecieron las amenazas de una invasión realista.
La suma de dificultades alcanzó su momento de mayor zozobra tras las derrotas de Manuel Belgrano en Vilcapugio y Ayohuma.
Fue entonces cuando Carlos María de Alvear, apoyado por la Logia Lautaro, animó a elegir un poder ejecutivo unipersonal. La crisis culminó con la disolución del Triunvirato y la elección del primer Director Supremo, Gervasio Antonio de Posadas.
Asamblea del Año XIII
La Asamblea del Año XIII, también conocida como la Asamblea General Constituyente del Año 1813, fue convocada por el Segundo Triunvirato, en las Provincias Unidas del Río de la Plata, que había accedido al poder en octubre de 1812. El objetivo fue llamar a una Asamblea que representase a los pueblos recién emancipados y que se definiese el sistema institucional de las Provincias Unidas del Río de la Plata. Aunque no logró contar con algunos representantes del interior, esta Asamblea se inauguró el 31 de enero de 1813.
El propósito era proclamar la independencia y redactar la Constitución del nuevo Estado. Durante su transcurso, los intereses sectoriales dividieron a los diputados, lo que culminó con una postergación de la declaración de la independencia. No obstante, durante esta Asamblea se establecieron una serie de resoluciones importantes.
Resoluciones de la Asamblea
Sello de la Asamblea
Sello de la Asamblea
Estableció el Escudo Nacional Argentino
Encargó la composición del Himno Nacional Argentino
Dictó la libertad de vientres de las esclavas
Eliminó mayorazgos y títulos de nobleza
Libró a los indígenas de la obligación de pagar tributo
Mandó a acuñar la moneda nacional
Abolió la Inquisición y la práctica de la tortura
Puso fin al tráfico de esclavos
Aprobó un estatuto reglamentario que reemplazaba al Triunvirato por un Directorio unipersonal
En relación con los esclavos, sus promotores anunciaron que su primera medida sería la liberación de todos los esclavos en el territorio nacional; eso provocó las airadas protestas del Brasil, ya que muchos de sus propios esclavos se fugaban hacia el territorio rioplatense. En consecuencia se dictó sólo la libertad de vientres: esta ley consistía en que los hijos de esclavos nacidos en territorio de las Provincias Unidas, eran libres. La esclavitud se abolió definitivamente con la Constitución Argentina de 1853.
La Asamblea asumió la soberanía nacional, por primera vez en nombre del pueblo, y no del rey Fernando VII. Por ello asumió la dirección del gobierno, y durante los primeros meses de 1813 tuvo una autoridad muy superior a la del Triunvirato.
Con el paso del tiempo, gracias en parte a la prédica de Bernardo de Monteagudo, la Asamblea decidió ceder la iniciativa al Poder Ejecutivo. Suspendió varias veces sus sesiones, dejando en libertad al Triunvirato para gobernar sin limitaciones.
A principios de 1814, la Asamblea dio un paso más en dirección a la concentración del poder en el Ejecutivo, al crear el Directorio, cargo unipersonal para el que eligió a uno de los miembros más nuevos del Triunvirato, Gervasio Posadas, quien gobernó sin consultar casi a la Asamblea.
Desde la segunda mitad del año 1814, la Asamblea ya casi no se reunió: apenas dos veces más en el gobierno de Posadas, la segunda para elegirle un sucesor, en la persona del general Carlos María de Alvear. Bajo el gobierno de éste sólo se reunió una vez, sólo para refrendar lo actuado por el Director.
En definitiva, los objetivos para los cuales había sido convocada la Asamblea del año XIII no se cumplieron, ya que el rey Fernando VII volvió al trono y prometió acabar con cuanto revolucionario hubiese aparecido en América y España.
Una de las primeras medidas anunciadas por la Asamblea fue la de declarar a los diputados como "de la Nación", y no, "de los pueblos", es decir de las provincias. Además, se negaba el derecho de los cabildos que los habían nombrado a reemplazarlos; era un paso importante hacia un régimen de gobierno unitario.
En consonancia con esta medida, meses más tarde se negó a incorporar a los diputados de la Banda Oriental, elegidos bajo la protección del líder del partido federal, José Artigas, con excusas de vicios formales en la elección. La realidad es que se negaba a incorporar diputados que llegaban con claras instrucciones de sus mandantes, orientadas a imponer un régimen federal y a declarar inmediatamente la independencia.
Estas medidas fueron complicando las relaciones con las provincias, especialmente con la Banda Oriental y con Artigas. En definitiva, fueron pasos hacia el comienzo de la guerra civil en la Argentina, que estalló en enero de 1814 y enfrentaría a federales y unitarios por más de sesenta años.
• Predecesor Director Supremo Carlos M. de Alvear
• Sucesor Director Supremo José Rondeau
El Tercer Triunvirato es el nombre del gobierno que tuvo lugar en las Provincias Unidas del Río de la Plata (conocidas entonces como Provincias Unidas en Sudamérica) en 1815. en medio del período del Directorio, debido a su efímera duración es pocas veces mencionado en libros y manuales de historia, aunque es reconocido nacionalmente.
Fue formado por:
José Francisco de San Martín
Matías de Irigoyen
Manuel de Sarratea
Cuando una revolución popular provocó la renuncia del entonces Director Supremo Carlos María de Alvear, el 18 de abril de 1815, se nombró provisoriamente a un nuevo triunvirato, el Tercer Triunvirato, que tendría vigencia hasta el nombramiento de un nuevo Director Supremo.
Finalización
Dado su carácter provisorio hasta el nombramiento de un nuevo Director Supremo, éste nuevo triunvirato se disolvió el 20 de abril de 1815, dos días después de haber sido creado, tras el nombramiento de José Rondeau con tal cargo. Sin embargo, al encontrarse en el Alto Perú, el nuevo director fue rápidamente reemplazado en cuestión de horas por Ignacio Álvarez Thomas.
Director Supremo de las Provincias Unidas del Río de la Plata
El Directorio
fue la forma de gobierno establecida en 1814 por la Asamblea del Año XIII para las Provincias Unidas del Río de la Plata, de acuerdo al cual un Director Supremo se hacía cargo del poder ejecutivo con un mandato de dos años. Tenía el título oficial de Director Supremo de las Provincias Unidas del Río de la Plata.
La Asamblea procuraba así hacer frente a la amenaza realista, agravada por enfrentamientos internos en el bando patriota. Con el fin de evitar los abusos de poder, el Directorio debía estar integrado además por un Consejo de Estado compuesto por 9 personas, y responder ante un Congreso destinado a ejercer funciones legislativas.
Presidente de la Nación Argentina
El Presidente de la Nación Argentina es el Jefe de Estado, Jefe de Gobierno, responsable político de la administración general del país y Comandante en Jefe de todas las Fuerzas Armadas de la República Argentina.
Bernardino Rivadavia fue nombrado Presidente de las Provincias Unidas del Río de la Plata, cargo y título creado por ley del Congreso del 8 de febrero de 1826. Justo J. de Urquiza desempeñó la jefatura del Estado como "Presidente de la Confederación Argentina" de acuerdo con la Constitución original de 1853, al igual que su sucesor, Santiago Derqui, quien luego de las reformas constitucionales de 1860, asumió el título de "Presidente de la Nación Argentina", vigente hasta nuestros días.
En la actualidad la llamada Casa Rosada, situada al este de la Plaza de Mayo, es la sede del poder ejecutivo de la Nación Argentina.
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